Con motivo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, ¡hablemos de las citas entre homosexuales y discapacitados!

Feliz Día Internacional de las Personas con Discapacidad En este blog, quiero explorar algunas de las alegrías de tener citas siendo discapacitado y queer, al tiempo que destaco algunas de las dificultades que experimentan las personas discapacitadas al lanzarse a la piscina de las citas. Entremos de lleno, ¿vale?

El placer de salir con alguien discapacitado y homosexual

Una de las alegrías que más me gusta de salir con alguien discapacitado es la oportunidad que tengo de enseñarle a alguien lo que es la discapacidad en mi vida.

Mucha gente tiene ideas equivocadas sobre la discapacidad, así que poder demostrarles que mi discapacidad no tiene nada que ver con lo que se imaginan me llena de alegría.

Les introduzco en un mundo en el que quizá tenían miedo de entrar y veo cómo se abre de par en par su visión de la discapacidad. Esa sensación de saber que sólo por estar conmigo, ya sea en una cita o sólo una noche, les ha cambiado para mejor.

Introducción al sexo y la discapacidad

Otra de las cosas que me alegran de las citas es poder iniciar a mis citas en el placer del sexo con discapacitados. ¿Qué podría ser más caliente que soplar … su mente con lo perfecto sexo discapacitados puede ser? ¿Sabía que los discapacitados son los mejores amantes?

También me encanta involucrar a mi pareja en mis prácticas de sexo seguro y hacer que sea algo que podamos experimentar juntos. En mi vida sexual, como consecuencia de mi discapacidad, tengo mala destreza, así que necesito que mi pareja me ayude a ponerme el preservativo.

Pero he aprendido que necesitar ese tipo de ayuda puede ser sensual. También me gusta mucho poder tomar las riendas de mi salud sexual con kits de análisis caseros como los que ofrece Q Care Plus.

Siendo discapacitada como soy, acudir a una clínica de salud sexual suele ser inaccesible para mí, por lo que las pruebas en casa y las visitas virtuales al proveedor Q Care Plus ofertas con expertos en salud sexual me permite saber qué pasa para poder volver a mostrar a mi cita lo atractivas que son las personas discapacitadas.

Seamos vulnerables

Una de las cosas que más me gustan de las citas como persona discapacitada es la vulnerabilidad que tengo que demostrar.

Como estoy gravemente discapacitado, necesito profundizar mucho y muy rápido. Me encanta esta parte de las citas, porque no hay nada dulce, nada de fingir, nada de pretensiones ni nada por el estilo.

Es una forma estupenda de saber si alguien está preparado para estar conmigo. Me gusta emplear la vulnerabilidad como superpoder en una cita, y si no es bien recibida, puedo seguir adelante: no hay mal que por bien no venga. Me alegra saber que mi discapacidad me garantiza que no perderé mi valioso tiempo con alguien que no está preparado.

Pero, por supuesto, salir con una persona queer y discapacitada conlleva sus propias dificultades, así que vamos a analizarlas también.

Las dificultades de tener citas siendo homosexual y discapacitado

Una de las mayores dificultades que encuentro a la hora de salir con alguien discapacitado y queer es mi propio capacitismo interiorizado. Paso tanto tiempo preocupándome de que mi discapacidad se interponga en mi camino, que a menudo doy a mis citas una salida antes incluso de dejarles entrar. Por ejemplo, suelo decir antes de una cita algo como: «¿Estás seguro de que mi discapacidad está bien?», dándoles la oportunidad de decir: «Por supuesto, estoy fuera». Ojalá pudiera acallar a veces mi propia voz que me dice que mi discapacidad es demasiado.

Los espacios queer no centran la accesibilidad

La inaccesibilidad de los espacios queer es otra de las grandes dificultades que tengo al intentar tener citas siendo queer y discapacitada. La mayoría de los espacios a los que acuden las personas queer para reunirse, expresar su sexualidad y tener acceso a los demás están vetados para alguien como yo. Lo peor es que nuestra comunidad, la que grita «amor es amor» a los cuatro vientos, no hace nada para garantizar la accesibilidad. No tener ningún lugar donde ser uno mismo y conectar tu homosexualidad y tu discapacidad es definitivamente duro.

Más información

Espero que al leer esto hayas pensado en tus propias alegrías y dificultades como persona discapacitada y queer.

Si lees esto y no eres discapacitado, espero que hayas pensado en algunas formas de hacer que salir con alguien discapacitado sea menos difícil y menos incapacitante.

Si alguien cree que la PPrE no está a su alcance por cualquier motivo, que lo intente con mis amigos de Q Care Plus. Hacen que las cosas sean fáciles, cómodas y asequibles para cualquiera que tenga dificultades para tomar la PPrE. Lo hacen mediante pruebas en casa, visitas virtuales al proveedor y medicamentos enviados directamente a su puerta en envases discretos.